La polémica en torno a la enseñanza de la asignatura de Religión en la escuela asturiana, que parecía adormecida, se recrudece. Tanto los colectivos laicistas como los que defienden el derecho a impartir esta materia en los centros anuncian nuevas medidas de presión y denuncias. La convivencia que buscaba la reforma educativa con la LOE no acaba de ponerse en práctica y parece haber fracasado por incumplimiento de la legislación vigente.

Los profesores de Religión están dispuestos a demandar a la Consejería de Educación por incumplir la ley. Un recurso contencioso-administrativo se puede formalizar en los tribunales antes de las vacaciones de Navidad. Tres años después de la entrada en vigor de la LOE los Profesores de Religión siguen denunciando que no se están cumpliendo los artículos que regulan la asignatura, fundamentalmente en Bachillerato.

En los institutos se ponen horarios imposibles para disuadir a los alumnos de matricularse, de no respetar el transporte escolar para dificultar su regreso a casa y de hacer la vista gorda con el absentismo en la clase de atención educativa, que en el Bachillerato se convierte en "alternativa" a Religión ante la falta de la alternativa académica que legalmente debe existir. ¿Cuál es entonces la responsabilidad del Gobierno del Principado? Dejar actuar con total libertad a los equipos directivos a pesar de que les han presentado denuncias con pruebas. Creen los profesores que están incurriendo en una flagrante dejación de funciones.

Por su parte, el colectivo Asturias Laica remitirá la próxima semana una carta a la Consejería de Educación reclamando una reunión formal para tratar de salvar las tensiones que se están produciendo en los centros. Culpa a los profesores de Religión de presionar a los equipos directivos y de presentar constantes denuncias contra los centros por absentismo. Asturias Laica quiere que se acuerde una convivencia pacífica entre los padres, los colectivos de docentes y la administración, pero dejando al margen a los que imparte Religión, lo que ya es un síntoma evidente del sectarismo con que se pretende actuar. Su portavoz, José Luis Iglesias, señala que la ley está clara para ellos y que no deben intervenir en las decisiones de los centros.

Datos sobre la  Religión en los IES

¿Cuántos centros ponen esta asignatura en Bachillerato a última hora o por la tarde? 36 centros lo hacen en primero y 30, en segundo. ¿Cuántos no controlan la asistencia a atención educativa? 51. ¿En cuántos ha desaparecido ya la clase de Religión? 14 centros no lo imparten en primero y 20, en segundo. ¿Cuántos están cumpliendo escrupulosamente la ley y no hay peligro de desaparición de la clase? Los docentes han contabilizado 15 en primero y 13 en segundo.

Es evidente que la Administración no está cumpliendo con lo que exige la LOE. Acudir a los tribunales es lo último, pero cuando no se deja otra opción, hay que plantearselo. La consejería no está velando por los derechos de todos los alumnos.

El profesorado de religión admite, tal y como les acusa Asturias Laica, que ha cursado quejas a la Inspección Educativa. En unos casos lo hacen directamente los profesores, en otros, para no enfrentarse a sus compañeros, lo hacen a través organizaciones. También la Delegación Diocesana de Enseñanza ha recogido los incumplimientos y los ha trasladado a la Consejería, pero no hay respuesta por parte de la Consejería.

Colectivos laicistas asturianos

La postura de Asturias Laica es justo la contraria, sin ningún punto de encuentro. José Luis Iglesias afirma que tienen que defender los intereses de los alumnos que no escogen Religión, sobre todo en Bachillerato, que es un ciclo con una gran carga lectiva y enfocado a superar la PAU.

Iglesias indica que están recibiendo multitud de quejas de padres de alumnos que no están matriculados en Religión y que no ven bien que sus hijos tengan que permanecer una hora más en el centro para asistir a una clase carente de contenidos, como es atención educativa. Estas familias les autorizan a abandonar el centro antes, pero como existen denuncias pueden perder su derecho a examinarse del resto de materias, ya que no se consideran faltas justificadas. En concreto, conocen un caso en Avilés en el que intervino, incluso, la Inspección Educativa.

Asturias Laica es consciente de que en los institutos “hay un conflicto” por lo que reclama a la consejería “que abra una negociación con la partes”. En este caso, cree que en la mesa deberían sentarse los padres, los equipos directivos de los institutos y la administración, para encontrar una solución a esos estudiantes que “se sienten castigados por tener que estar una hora más en el centro sin tener nada que hacer”. Aunque los problemas se centran en Bachillerato, advierte que comienza a haberlos también en Primaria y Secundaria.

APPRECE ASTURIAS, como puede comprobarse por el Documento Legal que adjuntamos a esta información, viene aportando argumentos legales más que suficientes para que en el Principado se actuara de acuerdo con la Ley, aunque es consciente de que al tratarse de una cuestión de Estado es el Ministerio de Educación el que tiene que indicar la alternativa académica a la Religión en el Bachillerato, para que sea de verdad opcional.

La Consejería de Educación del Principado si que tiene la obligación legal para que los alumnos que no optan por la enseñanza de la religión sean debidamente atendidos con la organización de actividades que deben figurar aprobadas en el Plan de Centro de los IES.

                            Asturias, 14 de noviembre de 2010